La reciente disputa pública entre el padre de Max Verstappen, Jos Verstappen, y el jefe del equipo de Red Bull, Christian Horner, en el Gran Premio de Austria fue considerada innecesaria y desagradable por el líder del campeonato de Fórmula 1. Sin embargo, la respuesta de Max indica que él no ve a ambas partes como igualmente responsables del desacuerdo. Jos acusó a Horner de intentar sacarlo de un «desfile de leyendas» organizado por Red Bull, pero Horner negó cualquier implicación. Aunque Jos se retiró voluntariamente, Horner hizo varios comentarios que parecían dirigidos al padre de Max. Max estaba comprensiblemente infeliz con la situación que se desarrollaba entre bastidores.
Después de su victoria en la carrera de sprint del Gran Premio de Austria, Max expresó su insatisfacción con la situación. Reconoció que no fue una experiencia agradable para él, su padre, Christian o el equipo. Dejó claro que no quería que ocurrieran este tipo de incidentes y comprendía la perspectiva de su padre. Max enfatizó que estaba enfocado en su rendimiento y quería mantener una buena relación con todos los involucrados. Sin embargo, creía que toda la situación podría haberse evitado.
La concordancia de Max con la creencia de su padre de que no era deseado para conducir el automóvil es significativa. Esto está en línea con su frustración general por las tensiones fuera de la pista que han empañado la temporada de Red Bull. Aunque Max ha permanecido públicamente neutral en los conflictos dentro del equipo, intervino cuando hubo discusiones sobre la remoción del asesor de Red Bull, Helmut Marko. El propio Marko pidió un enfoque en los asuntos de la pista durante una aparición en televisión. Max probablemente comparte esa visión, considerando sus comentarios previos al fin de semana sobre McLaren siendo una amenaza seria.
Max elogiou el rendimiento de McLaren, describiendo su coche como sólido y bueno en todas las áreas, especialmente en cuanto a la vida útil de los neumáticos en comparación con Red Bull. También expresó el deseo de más velocidad en el RB20 después de sentirse muy lento en el Gran Premio de España, a pesar de ganarlo. Aunque Red Bull mostró alguna mejora en el Red Bull Ring, la perspectiva general de Max sigue sin cambios después de una carrera sprint desafiante contra Lando Norris.
Durante el mismo fin de semana, Max confirmó que se quedaría con Red Bull hasta 2025. Sin embargo, se cree que todavía podría considerar opciones alternativas en el futuro, incluso durante la duración de su contrato actual. Por lo tanto, sería sabio que Red Bull alineara su mensaje público con los deseos de Max, ya sea en disputas menores o en cuestiones más significativas.