Al final, fue frustración, decepción y enojo lo que Amanda Anisimova experimentó en el Abierto de Canadá, un evento WTA 1000 celebrado en las canchas duras de Toronto. Anisimova, una tenista estadounidense, enfrentó la derrota a manos de su compatriota Jessica Pegula, quien aseguró su segundo título de la temporada y tercera victoria WTA 1000 en su carrera. El partido se extendió a tres sets y al concluir la intensa batalla, Amanda no pudo contener su decepción y derramó lágrimas amargas. En una muestra de frustración, incluso rompió su raqueta, como se muestra en las imágenes adjuntas. Sin embargo, a pesar de estas emociones, Anisimova aún puede estar orgullosa de su desempeño durante todo el torneo.
Después de un descanso de ocho meses para recuperar su equilibrio en un mundo que a menudo abruma con presión y vulnerabilidad, Anisimova ha regresado triunfal al tenis competitivo, para deleite de sus fanáticos. Después de su derrota ante Arantxa Rus en Madrid en 2023, Amanda tomó la decisión de pausar su carrera por el bienestar de su salud mental. Durante este receso, se sumergió en la vida universitaria y abrazó lo que consideraba una existencia «normal». La idea de abandonar el tenis a los 21 años nunca cruzó realmente su mente. Los sacrificios que había hecho eran demasiado significativos para abandonar sus sueños tan fácilmente. Con cada día que pasaba en el WTA 1000 en Toronto, perfeccionaba sus habilidades y fortalecía su resistencia mental.Expresando su alegría y sorpresa, Anisimova compartió: «Estoy extremadamente feliz y orgullosa de este logro significativo. Es algo por lo que he trabajado incansablemente. Mi semana en Toronto ha sido realmente notable y todavía tengo hambre de éxito. Espero también tener un buen desempeño en la final. En cuanto a mis aspiraciones de ganar un Grand Slam y alcanzar el número uno en el ranking, no puedo imaginar terminar mi carrera sin lograr estos objetivos. Estoy determinada a dar lo mejor de mí y trabajar diligentemente todos los días. Creo que con una dedicación inquebrantable, todo esto puede convertirse en realidad».
Reflexionando sobre su tiempo lejos del deporte, Anisimova reveló: «Cuando tomé la decisión de tomar un descanso, sabía que no quería concluir mi carrera de esa manera. Tenía mucho más por lograr y no quería detener prematuramente mi viaje. Había hecho numerosos sacrificios y siempre supe que volvería. El descanso me permitió prepararme para los desafíos que se avecinan. Ahora poseo las herramientas necesarias para enfrentar tiempos difíciles. Sin embargo, siempre he tenido la fortaleza mental para superar el dolor y la adversidad. Tener la oportunidad de experimentar seis meses de una vida «normal» ha sido increíblemente gratificante. Disfruto mucho asistir a la universidad y poder hacerlo en persona ha sido una experiencia agradable. Anteriormente, había tomado clases en línea, por lo que fue refrescante tener interacciones cara a cara».
Foto de Amanda Anisimova en Instagram.
