Kim y Terry Pegula son más que solo los dueños multimillonarios de los Buffalo Bills; son el corazón y el alma de la escena deportiva de Buffalo. Desde que compraron los Bills en 2014 y los Buffalo Sabres en 2011, esta pareja poderosa ha transformado el panorama deportivo local, convirtiéndose en algunos de los propietarios de la NFL más admirados (y ricos), con un patrimonio neto combinado de $8 mil millones. Sin embargo, a pesar de todas las inversiones y grandes sueños, un objetivo les ha eludido: llevar un Super Bowl a Buffalo.
El viaje de Terry es uno de determinación y astucia. Comenzando con un préstamo de $7,500 de sus padres, construyó un imperio de petróleo y gas, fundando East Resources en 1983. En 2010, tocó oro, vendiendo la mayoría de los activos de East Resources a Shell por $4.7 mil millones. Kim, nacida en Corea del Sur, ha sido una fuerza igual, habiendo sido anteriormente presidenta y CEO de Pegula Sports and Entertainment (PSE). Su liderazgo ayudó a gestionar su vasta cartera deportiva hasta que Terry disolvió PSE en 2023, cambiando el enfoque exclusivamente a los Bills y Sabres.
Más allá de la NFL y la NHL, los Pegula han invertido en lacrosse (los Buffalo Bandits y los Rochester Knighthawks) y hockey (los Rochester Americans). Su hija, la estrella del tenis Jessica Pegula, también está causando sensación con un patrimonio neto estimado de $13 millones, mostrando que el deporte—y la ambición—corren en la familia.
Mientras los aficionados de Buffalo están agradecidos por el compromiso de los Pegula con su ciudad, el sueño último de una victoria en el Super Bowl permanece. Como declaró Terry en 2014, “Poseer cualquier equipo profesional se trata de ganar… nuestro objetivo principal será ganar el Super Bowl y traer campeonatos a Buffalo.” Entonces, ¿puede esta pareja multimillonaria finalmente hacerlo realidad, o el Trofeo Lombardi está destinado a permanecer fuera de alcance?
Con su dedicación e inversiones, los Pegulas han construido un legado deportivo; ahora es el momento de ver si ese legado incluirá un Super Bowl.