En un movimiento audaz que ha enviado ondas de choque a través del mundo del golf, el expresidente Donald Trump ha consolidado su asociación con LIV Golf, la liga respaldada por Arabia Saudita que ha estado desafiando al tradicional PGA Tour. Uniéndose oficialmente en octubre de 2022, la participación de Trump se marcó con el evento inaugural de LIV Golf en el Trump National Doral Miami, señalando el inicio de una lucrativa alianza.
El entusiasmo de Trump por LIV Golf ha sido inquebrantable desde el inicio de la asociación. Durante una entrevista sincera con CNN, instó a los golfistas profesionales a «tomar el dinero ahora», una invitación clara a unirse a la creciente serie que promete recompensas financieras sustanciales. Esta declaración subraya la posición estratégica de Trump de LIV Golf como una alternativa viable y rentable al establecido PGA Tour.
El expresidente ha sido vocal sobre las perspectivas financieras de LIV Golf, afirmando audazmente que la serie «ha valido miles de millones de dólares». Esta declaración no solo destaca la significativa inversión detrás de LIV Golf, sino que también insinúa las ganancias financieras personales que Trump podría obtener de su éxito. Su participación no es meramente como un apoyo, sino como un promotor clave, aprovechando su marca e influencia para elevar la serie en el escenario global.
A lo largo de 2023, el Trump International Golf Club se convirtió en un lugar habitual para los eventos de la LIV Golf Invitational Series, albergando tres torneos importantes. Si bien ni la Trump Organization ni LIV Golf han divulgado públicamente los beneficios financieros de esta colaboración, informes de investigación por Eric Lipton del New York Times sugieren que la familia Trump podría haber obtenido indirectamente beneficios significativos de su asociación con la empresa multimillonaria.
Los incentivos financieros vinculados a LIV Golf han motivado evidentemente a Trump a expandir aún más su presencia en la industria del golf. Informes recientes indican un aumento notable en los ingresos tanto de Trump National Bedminster como de Trump National Doral, correlacionándose directamente con la decisión de LIV Golf de realizar eventos de torneos premium en estos prestigiosos clubes. Este aumento de ingresos ha fortalecido a Trump para incrementar sus inversiones en la serie, señalando un compromiso cada vez más profundo con su crecimiento y éxito.
De cara al futuro, Trump ha anunciado una ambiciosa expansión de su imperio golfístico con el lanzamiento de un segundo club de golf en Aberdeenshire, Escocia. Programado para abrir en el verano de 2025, la nueva instalación, llamada el Macleod Course en honor a su madre nacida en Lewis, contará con 18 hoyos meticulosamente diseñados y presumirá de las dunas de arena más grandes de Escocia. A pesar de las controversias ambientales que rodean las dunas en Menie, Aberdeen—donde perdieron su estatus como un entorno protegido de importancia nacional en 2020—Trump sigue siendo firme sobre la sostenibilidad de su nuevo campo. Sarah Malone, Vicepresidenta Ejecutiva de Trump International Scotland, elogió el Macleod Course como «una de las grandes maravillas en el mundo del golf,» enfatizando su singular combinación de belleza natural y excelencia golfística.
Las maniobras estratégicas de Trump dentro de la industria del golf destacan su búsqueda de oportunidades financieramente lucrativas para fortalecer su imperio empresarial. Sin embargo, su elección de alinearse con LIV Golf en lugar de con el PGA Tour plantea preguntas intrigantes, especialmente dado sus vínculos profundos con el PGA como ex Presidente de los Estados Unidos. Históricamente, Trump albergaba aspiraciones de albergar eventos del PGA Tour e incluso intentó forjar asociaciones con el PGA para integrar sus campos de golf en el calendario del Tour. Desafortunadamente, estos esfuerzos fueron supuestamente recibidos con resistencia, lo que llevó a una relación «en gran medida ignorada», como señaló Lipton.
En contraste, LIV Golf aprovechó la oportunidad de colaborar con Trump, creando una relación mutuamente beneficiosa que ha demostrado ser rentable para ambas partes. Esta alineación ha permitido a LIV Golf aprovechar la marca e influencia de Trump para ganar legitimidad y atraer talento de alto nivel, mientras que Trump se beneficia de la asociación con una empresa de alto perfil y valor de mil millones de dólares.
A medida que el mundo del golf observa la saga en desarrollo de la participación de Trump con LIV Golf, la anticipación crece para la gran apertura del Macleod Course y la próxima temporada de LIV Golf. La temporada 2025 está programada para comenzar el 6 de febrero en el Riyadh Golf Club en Arabia Saudita, prometiendo un nuevo capítulo en los ambiciosos planes de expansión de la serie. Los entusiastas del golf y los insiders de la industria están ansiosos por ver cómo las inversiones estratégicas y los esfuerzos promocionales de Trump darán forma al futuro del golf profesional.
Mientras tanto, la sinergia entre las empresas de golf de Trump y LIV Golf sigue generando interés, posicionando a ambas entidades en la vanguardia de una arena deportiva en transformación. A medida que Donald Trump continúa aprovechando su perspicacia empresarial y su pasión por el golf, la intersección de la política, los negocios y el deporte sigue siendo tan dinámica e influyente como siempre, asegurando que su legado en el mundo del golf sea tanto impactante como duradero.