Irán ha enviado un mensaje firme a Israel a través de canales diplomáticos europeos, advirtiendo sobre severas consecuencias si las fuerzas israelíes atacan la infraestructura crítica de Teherán, incluidos sus instalaciones petroleras y nucleares. Fuentes diplomáticas revelaron a Asharq Al-Awsat que, aunque Irán podría “ignorar” ataques menores de Israel, consideraría cualquier ataque directo a estos activos vitales como una “línea roja”, lo que provocaría una escalada inevitable.
El intercambio se produce mientras Oriente Medio se prepara para tensiones crecientes. Israel está supuestamente preparando una respuesta al ataque con misiles de Irán del 1 de octubre, y la próxima visita del Ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, a EE. UU. podría marcar el momento para una respuesta oficial israelí.
El presidente iraní, Masoud Pezeshkian, durante una visita diplomática a Turkmenistán, subrayó la renuencia de Teherán al conflicto, pero reiteró la disposición de Irán para actuar en defensa si es provocado. Pezeshkian también instó a Israel a detener sus acciones militares en Gaza y Líbano, un movimiento visto como un llamado para prevenir una mayor inestabilidad regional.