Los San Francisco Giants están desesperados por poder, y Anthony Santander podría ser la respuesta. Después de terminar una decepcionante temporada con 80 victorias y 82 derrotas en 2024, los Giants están reestructurando su equipo para 2025, y el nombre de Santander está en la parte superior de la lista de posibles fichajes de agentes libres. El toletero de 29 años, recién salido de una explosiva temporada con los Baltimore Orioles, entra a la agencia libre con mucho ruido, y con buena razón. Santander rompió su récord personal con 44 jonrones, solo superado por Aaron Judge en la Liga Americana, y presentó números impresionantes en todos los aspectos, con un OPS de .814, un OPS+ de 135 y 102 carreras impulsadas.
El poder de Santander sería un gran impulso para los Giants, un equipo que ha estado hambriento de bateadores de jonrones desde la era de Barry Bonds. La última vez que un jugador de los Giants conectó 30 o más jonrones fue en 2004, cuando Bonds bateó 45. Santander, con dos temporadas de más de 30 jonrones en su haber, incluida su monstruosa campaña de 2024, podría finalmente poner fin a esa sequía.
La alineación de San Francisco luchó por producir poder constante la temporada pasada, especialmente en el jardín derecho y como bateador designado, donde se ubicaron en los niveles medios a bajos de MLB. Mike Yastrzemski, el jardinero derecho principal, logró solo 24 jonrones, y Jorge Soler, quien se suponía que sería su respuesta de poder, fue cambiado en la fecha límite después de conectar solo 12 jonrones. Los Giants necesitan a alguien que no solo pueda aportar grandes números, sino también permanecer en la alineación, y la versatilidad de Santander como jardinero derecho y bateador designado ocasional encaja perfectamente.
El desafío para Santander en San Francisco será Oracle Park, que ha sido notoriamente difícil para los bateadores. Se clasifica como el lugar más complicado para batear jonrones en las últimas tres temporadas, pero si alguien puede superar eso, es Santander. Su potencia bruta ya le ha ganado un lugar entre los mejores de la liga, y su capacidad para manejar entornos difíciles podría convertirlo en la amenaza de poder que los Giants necesitan desesperadamente.
Con un contrato proyectado de cinco años y 88 millones de dólares sobre la mesa, Santander sería una inversión seria para los Giants, pero una que podría dar grandes frutos. Los Giants necesitan una fuente de poder legítima para competir en una dura NL West, y Santander podría ser el hombre adecuado para hacerlo.