En otra controversia que rodea a los campeones reinantes de la Fórmula 1, Red Bull se encuentra bajo escrutinio mientras la FIA investiga las afirmaciones sobre su sistema de ajuste de altura de la suspensión. Equipos rivales, particularmente McLaren, han expresado preocupaciones de que Red Bull podría haber estado alterando la altura de la suspensión durante las condiciones de parc fermé, lo que constituiría una violación de las regulaciones del deporte.
Si bien la FIA ha aclarado que no se rompieron reglas, sellando el dispositivo frontal de Red Bull en Austin para mayor seguridad, el CEO de McLaren, Zak Brown, ha exigido más respuestas. La insistencia de Brown en una investigación más profunda no es sorprendente, dado que su equipo está luchando contra Red Bull tanto en el Campeonato de Constructores como en la búsqueda de Lando Norris por el título de Pilotos contra Max Verstappen.
Hablando con Sky Sports F1, el director del equipo Red Bull, Christian Horner, rechazó las acusaciones. “Cada coche tiene una herramienta que puede ajustar la parte delantera del suelo, conocida como el bib,” explicó Horner. “El nuestro está ubicado en la parte delantera, delante del espacio para los pies, y ha estado allí durante más de tres años. Para acceder a él, necesitas quitar varias partes, incluidos los pedales, otros paneles y tuberías.”
Horner fue rápido en desestimar las afirmaciones, enfatizando la complejidad de acceder al dispositivo y comparándolo con el ajuste de otros componentes del coche. “Todo es parte del empaquetado en la parte delantera del chasis,” dijo, insistiendo en que el mecanismo no era nada fuera de lo común.
Cuando se le presionó sobre por qué la FIA solicitó el sellado del dispositivo, Horner lanzó una crítica a McLaren, específicamente a Zak Brown. “Creo que ha habido un poco de quejas por parte de uno de nuestros rivales,” dijo de manera contundente. “Es trabajo de la FIA investigar estas cosas, y este componente en particular ha estado disponible públicamente durante tres años. La FIA está satisfecha con ello, probablemente solo satisfaciendo alguna paranoia en otro lugar del paddock.”
Horner continuó, enfatizando que Red Bull ha seguido todas las reglas al pie de la letra. “Podemos sellar cada junta móvil del coche porque el parc fermé dicta que no se puede cambiar nada. Para eso está el parc fermé. Hemos cumplido con todas las regulaciones, y la FIA está cómoda con todo.”
A pesar de la saga en curso, el rendimiento de Red Bull en la pista parece no verse afectado. Max Verstappen aseguró la pole position para la carrera Sprint en Austin, señalando que el equipo sigue enfocado y listo para enfrentar los desafíos del fin de semana.
Por ahora, parece que Red Bull ha salido ileso de otra tormenta regulatoria, pero con rivales como McLaren aún pidiendo respuestas, esta controversia puede que no desaparezca pronto.