En un informe asombroso, la Casa Blanca reveló que Rusia está sufriendo más de 1,200 bajas por día en su brutal guerra contra Ucrania. Con el aumento de muertes y heridas, los funcionarios estadounidenses afirman que este asombroso costo señala la creciente desesperación y aislamiento del presidente Vladimir Putin en el escenario global.
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, enfatizó el catastrófico costo humano de la invasión rusa, diciendo que las fuerzas de Putin están pagando un precio extraordinario por su ambición «torcida y retorcida» de eliminar la soberanía de Ucrania. «No hay duda al respecto: sus fuerzas continúan sufriendo niveles históricos de bajas en el campo de batalla», dijo Kirby, mientras el control del Kremlin sobre el conflicto parece desvanecerse más cada día.
En medio de estas crecientes pérdidas, circulan rumores sobre el envío de tropas norcoreanas para reforzar el esfuerzo bélico en declive de Rusia. Corea del Sur ha afirmado que ya se han desplegado 1,500 soldados norcoreanos, con informes que sugieren que Pyongyang planea enviar un total de 10,000 tropas. Si bien Estados Unidos aún no ha confirmado estas alegaciones, los funcionarios están investigando activamente los informes. Si es cierto, marcaría una escalada significativa y peligrosa en la participación global en el conflicto.
Sumando a la intensidad, el secretario de Defensa de EE. UU., Lloyd Austin, anunció 400 millones de dólares adicionales en ayuda militar a Ucrania, reforzando la defensa del país devastado por la guerra con artillería, municiones para tanques y sistemas antitanque. El nuevo paquete de apoyo tiene como objetivo asegurar que Ucrania siga equipada para manejar el implacable asalto ruso, incluso mientras Moscú busca ayuda externa para mantener su ofensiva.
A medida que la batalla se intensifica y actores globales como Corea del Norte podrían entrar en la contienda, las apuestas en Ucrania son más altas que nunca. La estrategia de Putin muestra signos de colapso mientras sus fuerzas continúan perdiendo soldados, dejando al mundo a la espera de lo que vendrá a continuación.