En una provocadora demostración de fuerza, China ha lanzado ejercicios militares con fuego real cerca de Taiwán, advirtiendo a los barcos que se mantengan alejados de la zona tras un masivo ejercicio la semana pasada que ha dejado a funcionarios estadounidenses «seriamente preocupados». Estos ejercicios, que se llevan a cabo cerca de las islas Pingtan en la provincia sureña de Fujian, son parte de un ejercicio anual, sin embargo, el Ministerio de Defensa de Taiwán sugiere que también pueden ser una táctica para aumentar la disuasión regional en medio de las crecientes tensiones en el estrecho de Taiwán.
Los maniobras militares de un día de la semana pasada vieron movilizados a un asombroso número de 153 aeronaves, 14 buques navales y 12 barcos del gobierno chino, todos destinados a sellar puertos clave. Esta postura agresiva es una respuesta directa a la negativa de Taiwán a ceder a las demandas de Pekín de reconocerse como parte de la República Popular de China.
El Premier de Taiwán, Cho Jung-tai, condenó los ejercicios, afirmando: «Los ejercicios militares de China son una amenaza para la paz y estabilidad regionales,» y pidió a Pekín que cesara sus provocaciones. Reflejando estas preocupaciones, el portavoz del Departamento de Estado de EE. UU., Matthew Miller, expresó una seria inquietud sobre las actividades en curso, pidiendo moderación a la República Popular de China para evitar una mayor escalada en la región.
A medida que el mundo observa de cerca, la posibilidad de conflicto se cierne, subrayando la frágil estabilidad del estrecho de Taiwán.