En una desafiante exhibición de poder militar, el líder norcoreano Kim Jong-un realizó su primera visita pública a una base de misiles estratégica, inspeccionando misiles de largo alcance capaces de alcanzar a EE. UU., informó la prensa estatal el miércoles. Este raro vistazo a la infraestructura de misiles de Corea del Norte llega justo unas semanas antes de las elecciones presidenciales en EE. UU., señalando el intento de Kim de afirmar la presencia de su nación en el escenario global en medio de crecientes tensiones.
Fotografías publicadas por la Agencia Central de Noticias de Corea (KCNA) mostraron a Kim examinando ICBMs Hwasong-18 y misiles hipersónicos, subrayando la disposición del Norte para responder a las amenazas nucleares percibidas por parte de EE. UU. La visita destaca las ambiciones de Pyongyang de modernizar sus fuerzas de misiles, con Kim calificando a la fuerza de misiles estratégicos como «el núcleo» de la disuasión bélica del país.
Los expertos creen que esta demostración de fuerza tiene como objetivo desviar la atención de la supuesta movilización de tropas de Corea del Norte para apoyar a Rusia en Ucrania, lo que ha expuesto a Pyongyang a críticas internacionales. A medida que Kim intensifica su retórica y los esfuerzos de modernización de misiles, las tensiones globales aumentan mientras el mundo observa el próximo movimiento de Corea del Norte.