En una declaración audaz y desafiante, el presidente ruso Vladimir Putin sugirió que cualquier despliegue de tropas norcoreanas para apoyar el esfuerzo bélico de Rusia en Ucrania sería una «decisión soberana» de Moscú y Pyongyang. Hablando con los medios rusos el 25 de octubre, Putin se abstuvo de confirmar directamente la participación de soldados norcoreanos, pero declaró: “Una vez que sea necesario tomar una decisión, lo haremos.”
Los comentarios de Putin, su primera admisión indirecta sobre la posible presencia de fuerzas norcoreanas en Rusia, llegan en medio de informes de inteligencia ucraniana, surcoreana y estadounidense que indican que Corea del Norte ya ha enviado casi 12,000 tropas, incluidos oficiales de alto rango, a Rusia. Imágenes satelitales surcoreanas muestran supuestamente a soldados norcoreanos en camino a territorios rusos, potencialmente preparándose para su despliegue tan pronto como el 27-28 de octubre, según la inteligencia militar ucraniana.
Refiriéndose al Artículo 4 del tratado de defensa entre Rusia y Corea del Norte, Putin insistió en que las disposiciones del tratado permiten tal cooperación, añadiendo: «Lo que haremos con este artículo, eso sigue siendo una pregunta… Es nuestro asunto.» La firme postura del presidente ruso ha avivado la preocupación internacional sobre la creciente participación de fuerzas norcoreanas en el conflicto más volátil de Europa, alimentando temores de una alianza en expansión entre Moscú y Pyongyang en desafío a la oposición global.
Mientras Pyongyang desestimaba los informes sobre tropas como “rumores infundados”, las declaraciones de Putin señalan un posible cambio, sugiriendo que Rusia podría profundizar la cooperación militar con uno de los regímenes más aislados del mundo. A medida que Ucrania y sus aliados se preparan para nuevos desarrollos, la declaración de Putin “nuestro negocio” es un mensaje claro a la comunidad internacional de que Moscú no ve límites para expandir sus alianzas militares, por controvertidas que sean.
¿Invertirá esta asociación la balanza a favor de Rusia, o marcará una nueva fase peligrosa en el conflicto con Ucrania? Mientras Putin evalúa sus opciones, el mundo observa con la respiración contenida.