El pateador de los Baltimore Ravens, Justin Tucker, y el ala cerrada de los Kansas City Chiefs, Travis Kelce, se encontraron en una pequeña disputa antes del Juego de Campeonato de la AFC. Sin embargo, fue Kelce quien se rió al último, ya que los Chiefs emergieron victoriosos, asegurando su lugar en el Super Bowl. Pero la historia no termina ahí. La estrella defensiva de los New York Jets, Quinnen Williams, decidió divertirse un poco a expensas de Tucker durante los Juegos del Pro Bowl de la NFL.
Para refrescar tu memoria, Tucker había estado calentando cerca de los jugadores de los Chiefs antes del juego, lo que no le sentó bien a Kelce y Patrick Mahomes. En respuesta, Kelce no solo pateó el balón de Tucker, sino que también lanzó su casco. Tucker reveló más tarde que Kelce se había calentado excesivamente por el incidente, llegando incluso a llamarlo con un nombre despectivo.
Avancemos a los Juegos del Pro Bowl el domingo, y Williams se aseguró de prevenir cualquier hostilidad potencial que recordara al Campeonato de la AFC. De manera ligera, Williams despejó el área, asegurándose de que Tucker tuviera mucho espacio para hacer lo suyo. Este gesto juguetón de Williams sirve como recordatorio de que todos en la NFL son muy conscientes de la rivalidad en curso entre Tucker y los Kansas City Chiefs.
Tucker, por su parte, parecía tomar las bromas con buen humor. Se rió mientras Williams mantenía a otros jugadores del Pro Bowl a distancia, permitiendo que el pateador All-Pro se concentrara en sus patadas. Sin embargo, Tucker debería tener cuidado de no caer en el lado malo de Kelce. Lo último que quiere es enfrentarse a la ira de los devotos fanáticos de Taylor Swift en las redes sociales. Enfrentar ese tipo de reacciones es algo que nadie quiere experimentar.