El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ha abierto una importante investigación sobre presuntas intrusiones cibernéticas chinas que apuntan a destacados partidarios y políticos de Trump, incluyendo al senador J.D. Vance de Ohio. Los ataques, según informes, se centraron en recopilar datos relacionados con estrategias y discusiones de campañas políticas, lo que ha generado alarmas sobre las vulnerabilidades de ciberseguridad en los sistemas políticos estadounidenses a medida que se acerca la elección de 2024. Fuentes indican que los hackeos, orquestados por una red de telecomunicaciones china, buscaban influir en la política estadounidense al explotar datos sensibles. Los funcionarios del DHS tienen como objetivo descubrir el alcance total del ataque y prevenir más violaciones a medida que las amenazas cibernéticas aumentan en intensidad.
Con la integridad electoral bajo un intenso escrutinio, la investigación del DHS destaca el creciente riesgo de interferencia extranjera—y su potencial para impactar decisiones clave y la opinión pública de cara a 2024. La investigación tiene como objetivo fortalecer los protocolos de seguridad y hacer que las entidades sean responsables, señalando que EE. UU. contraatacará agresivamente las intrusiones extranjeras.