En una escalada significativa, el ejército de Israel confirmó la muerte de Mustafa Ahmad Shahadi, el comandante adjunto de las fuerzas de élite Radwan de Hezbollah, en un ataque aéreo dirigido en la ciudad sureña libanesa de Nabatieh. Shahadi, una figura de alto rango dentro del ala militar especializada de Hezbollah, fue supuestamente eliminado en un ataque de precisión, marcando otro golpe a la liderazgo del grupo respaldado por Irán.
La muerte de Shahadi sigue al asesinato el mes pasado de Ibrahim Aqil, el jefe de las fuerzas Radwan y segundo al mando del fallecido líder de Hezbollah, Hassan Nasrallah, quien también fue asesinado en un ataque aéreo israelí. Aqil había sido fundamental en la coordinación de las operaciones estratégicas de Hezbollah, con Shahadi sirviendo como su mano derecha. Los recientes ataques subrayan la campaña intensificada de Israel contra las altas esferas de Hezbollah, apuntando a figuras clave que comandaban las fuerzas más poderosas del grupo.
Las Fuerzas Radwan de Hezbollah Bajo Asedio
Las fuerzas Radwan, conocidas como la unidad de ataque de élite de Hezbollah, están encargadas de operaciones militares de alto nivel y han sido cruciales en la misión más amplia de Hezbollah contra las fuerzas israelíes. Bajo el mando de Shahadi, estas fuerzas ejecutaron maniobras tácticas complejas y se creía que se estaban preparando para un mayor compromiso en el conflicto en curso. La focalización de Israel en el liderazgo de Radwan se considera un intento de desestabilizar la estructura operativa de Hezbollah y debilitar su capacidad militar a lo largo de la frontera sur del Líbano.
Un portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel confirmó la muerte de Shahadi, enfatizando el enfoque en eliminar a las figuras clave de Hezbolá que están involucradas en amenazas directas a Israel. Con el liderazgo de Radwan sufriendo golpes sucesivos, la estructura de mando de Hezbolá enfrenta una interrupción sin precedentes, lo que plantea preguntas sobre la resiliencia operativa del grupo.
¿Qué sigue para la máquina de guerra de Hezbolá?
A medida que Hezbolá se recupera de la pérdida de Shahadi y Aqil, la organización se enfrenta a una necesidad urgente de estabilizar su cadena de mando. Las crecientes pérdidas entre sus altos mandos podrían afectar la capacidad de Hezbolá para orquestar ataques a gran escala, incluso cuando el nuevo líder Naim Qassem promete continuar el «camino de guerra» de Nasrallah contra Israel. La serie de ataques selectivos sugiere la intención de Israel de socavar la continuidad del liderazgo de Hezbolá, empujando a la organización a una posición de preparación debilitada.
Con las tensiones ya inflamadas, la región se prepara para una posible represalia mientras Hezbolá evalúa sus próximos pasos en respuesta a la campaña de Israel contra su alto mando. ¿Forzará la pérdida de sus comandantes de élite a Hezbolá a adoptar una postura defensiva, o inflamará aún más el ya volátil conflicto fronterizo?
Las fuentes para este artículo incluyen declaraciones de las Fuerzas de Defensa de Israel e informes de inteligencia regional sobre las operaciones militares de Hezbolá.