Los Golden State Warriors están de vuelta en la conversación por el campeonato, funcionando a toda máquina y encontrando formas de ganar, incluso sin jugadores clave como Stephen Curry y Andrew Wiggins en la cancha. Con victorias consecutivas sobre los New Orleans Pelicans, los Warriors parecen rejuvenecidos y más parecidos a su mejor versión de campeones.
No han sido victorias fáciles para los Warriors, con los Pelicans comenzando cada partido de manera intensa y agresiva. Pero la defensa revitalizada de Golden State, anclada por un feróz Draymond Green, ha demostrado ser la clave para la victoria. Green, el veterano maestro defensivo y cuatro veces campeón de la NBA, se ve más en forma que nunca y está tomando el control del lado defensivo como si fuera 2017 de nuevo.
Después de la victoria, Green se aseguró de enviar un mensaje a aquellos que podrían estar pasando por alto su impacto. Habiendo escuchado mucho ruido en la temporada baja sobre las estrellas defensivas en ascenso Chet Holmgren y Victor Wembanyama, Green aprovechó la oportunidad para recordar a los aficionados y analistas que su destreza defensiva está lejos de haber pasado su mejor momento. «Pasé todo el verano escuchando a la gente hablar sobre Chet y Wemby y lo que están haciendo defensivamente. No se olviden de Dray,» dijo Green a los reporteros, canalizando su confianza e intensidad.
En su enfrentamiento, Green ofreció una clínica defensiva contra Zion Williamson, limitando al explosivo alero a solo 5 de 20 en tiros y forzándolo a cometer cuatro faltas ofensivas. Este tipo de actuación encarna la filosofía defensiva de los Warriors: el estilo incansable de Green establece el tono, sacando lo mejor de sus compañeros de equipo.
Con solo una derrota en toda la temporada y un equipo bien equilibrado, los Warriors tienen profundidad, cohesión y adaptabilidad. El liderazgo de Draymond, junto con sólidas contribuciones ofensivas y defensivas en todo el equipo, ha ayudado a elevar la consistencia y competitividad de Golden State, independientemente de quién esté en la cancha.
Si Green continúa jugando a este nivel y se mantiene saludable, los Warriors parecen estar listos para hacer una seria carrera hacia otro título, demostrando una vez más que el corazón de un campeón no se rinde, simplemente encuentra nuevas formas de ganar.