Es solo cuestión de tiempo hasta que la Inteligencia Artificial (IA) llegue completamente a las carreteras, ya sea democratizándose en automóviles, ampliando las capacidades de la red de señalización, o inevitablemente convirtiéndose en una herramienta para mejorar la vigilancia en las vías. Los sistemas de IA reemplazarán progresivamente los medios tradicionales, eliminando sus limitaciones actuales.
Después de las cámaras de velocidad fijas, las cámaras de velocidad promedio y las cámaras móviles, se espera que una nueva generación de equipos conectados e inteligentes capaces de interpretar diferentes tipos de infracciones en tiempo real refuercen los métodos de control en las ciudades.
Estos radares se utilizan para detectar a los conductores que exceden el límite de velocidad, pero también registran el uso de teléfonos móviles mientras se conduce, la ausencia de cinturones de seguridad e incluso el hacinamiento en los carriles reservados.
Estos tipos de dispositivos, conectados a sistemas de gestión del tráfico para la cruce de datos, identifican automáticamente vehículos sin seguro o inspección.
Los radares 4D están integrados en el automóvil
Londres está probando una de estas nuevas unidades de Inteligencia Artificial (IA), que combina un radar 4D de alta calidad y cámaras de alta resolución. Las múltiples cámaras pueden monitorear hasta seis carriles, incluso en situaciones de visibilidad reducida.