La posición de Sergio Pérez en Red Bull ha sido objeto de escrutinio en las últimas semanas, y su rendimiento en México solo aumentó las especulaciones de que su lugar podría ser ocupado por Daniel Ricciardo la próxima temporada.
Pérez ganó por última vez en Azerbaiyán el 30 de abril, y su incapacidad para terminar en el Autódromo Hermanos Rodríguez pone en peligro su segundo lugar en el campeonato frente a Hamilton. De hecho, el campeón del mundo en siete ocasiones redujo la diferencia de 39 puntos a 20 con su sólida actuación.
Después de la carrera, Pérez le dijo a DAZN: «Estoy triste, sin duda, porque hoy era mi oportunidad. Tuve un muy buen inicio y solo pensé en ganar la carrera. No quería estar en el podio. Ya he estado en el podio dos años consecutivos.»
«Vi la oportunidad y la aproveché. En retrospectiva, tomé un riesgo, pero si hubiera tenido éxito, habría salido de la Curva 1 en la delantera. No esperaba que Charles frenara tan tarde, ya que estaba en el medio. Tenía mucho menos espacio que Max, que estaba por el interior, y yo era quien podía frenar más tarde porque estaba por el exterior.»
Esta cuenta destaca la determinación de Pérez para buscar la victoria, especialmente frente a sus aficionados locales en México, y la presión que siente por mantener su lugar en Red Bull. Su honestidad y reflexión sobre el incidente muestran su madurez y comprensión de la dinámica de la carrera.