Con el Día de las Elecciones acercándose rápidamente, Donald Trump enfrenta un creciente desafío con las votantes mujeres—una brecha que está activando alarmas dentro de su campaña. A pesar de su afirmación confiada en un mitin en Carolina del Norte el sábado de que “las mujeres me aman”, los datos de encuestas cuentan una historia diferente. Kamala Harris actualmente tiene una ventaja sustancial de 14 puntos entre las votantes mujeres, superando ampliamente la ventaja de seis puntos de Trump con los hombres, según encuestas recientes.
La ventaja de Harris con las mujeres no es un asunto menor para el campamento de Trump, especialmente ya que las mujeres están acudiendo en números récord para la votación anticipada, lo que aumenta el optimismo demócrata sobre la carrera por la Casa Blanca. El aumento ha puesto a la campaña de Trump en alerta, ya que algunos de sus asesores supuestamente se apresuran a abordar las preocupaciones sobre la participación electoral y el fraude electoral.
El enfoque de Trump hacia las votantes mujeres a menudo ha parecido indiferente, con su estrategia de campaña y mensajes principalmente dirigidos a audiencias masculinas. Su equipo también está marcado por varios aliados masculinos de alto perfil como Elon Musk, quien ha recibido críticas por comentarios controvertidos, incluyendo su reciente tuit ofreciendo «embarazar» a la cantante Taylor Swift. Los comentarios de Musk subrayan un problema más amplio para la campaña de Trump—una percepción de insensibilidad hacia las mujeres que el equipo de Harris ha capitalizado.
Si bien la ventaja de Harris con las votantes mujeres podría ser decisiva, la campaña de Trump continúa restando importancia a las preocupaciones, atribuyendo la brecha en las encuestas a lo que ven como sesgo mediático y cuestionando la fiabilidad de los datos de las encuestas. Sin embargo, el cambio demográfico es difícil de ignorar. Con las mujeres probablemente desempeñando un papel crucial en inclinar los estados indecisos, el equipo de Trump podría estar enfrentando un camino hacia la victoria más difícil de lo anticipado.