En una emocionante “Batalla de Nueva York”, los Buffalo Bills superaron a los New York Jets 23-20 con una intercepción en la última jugada de Aaron Rodgers. Este enfrentamiento de Monday Night Football no solo estrechó la carrera en la AFC Este, sino que también provocó un gran cambio para ambos equipos. Los Jets hicieron un intercambio por Davante Adams, pero los Bills respondieron con su propio movimiento espectacular, adquiriendo a Amari Cooper de los Cleveland Browns. Con la adición de un verdadero WR1 para apoyar a Josh Allen, Cooper aporta el factor X que la ofensiva de Buffalo ha necesitado desde que se separaron de Stefon Diggs.
Si bien los Bills ahora tienen un récord de 4-2 y lucen formidables, el equipo tiene debilidades que debe abordar para mantener su impulso hacia los playoffs. Primero, su línea ofensiva necesita refuerzos. Lesiones a titulares como David Edwards o Connor McGovern podrían descarrilar su ofensiva, y las preocupaciones sobre la profundidad están en aumento. Entra Daniel Brunskill, un liniero versátil con experiencia como titular en cada posición a lo largo de la línea ofensiva. Actualmente con los Tennessee Titans, Brunskill podría estar disponible si Tennessee continúa su racha de 1-4. Para los Bills, intercambiar una selección de ronda tardía para asegurarlo como un respaldo confiable podría ser una póliza de seguro inteligente para proteger a Allen y mantener su ofensiva en funcionamiento.
En defensa, las necesidades de Buffalo son igualmente urgentes, especialmente en la secundaria y en la posición de linebacker. El pasador de los Giants, Azeez Ojulari, presenta una opción intrigante como un pasador rotativo para reforzar su línea defensiva. Ojulari, un ex selección de segunda ronda, ha mostrado potencial con ocho capturas en su temporada de novato, pero se encuentra opacado en un equipo de los Giants sin un plan futuro claro para él. Si Buffalo pudiera conseguir a Ojulari por una selección de draft condicional, añadiría una presencia dinámica en la defensa, completando sus opciones de presión al mariscal de campo y creando un roster completo y decidido para 2024.
Aunque algunos aficionados cuestionaron la lógica detrás de intercambiar a Diggs por una selección de segunda ronda solo para ceder más capital de draft por Cooper, la estrategia de los Bills parece sólida. La adición de Cooper resuelve el problema del receptor X de Buffalo y permite que Allen utilice toda su gama de opciones de pase. Las recientes luchas del equipo con reemplazos menos efectivos como Shakir y Hollins han subrayado la necesidad de una amenaza profunda confiable, y Cooper está preparado para llenar ese papel.
Con Cooper listo para tener un gran impacto y Buffalo potencialmente considerando movimientos por Brunskill y Ojulari, los Bills están señalando que están totalmente comprometidos con esta temporada. Su plantilla ahora tiene las herramientas para competir, y a medida que se acercan los playoffs, esta alineación reorganizada podría hacer toda la diferencia en su búsqueda de dominio en la AFC.