Siete años después del lanzamiento del modelo original, Toyota comienza la fase de comercialización de la segunda generación del C-HR en Portugal. Este SUV compacto mide 4.36 metros de longitud y está destinado al segmento C europeo, el segundo más importante en el mercado del Viejo Continente. Al inicio de las ventas, la gama se limita al motor híbrido (1.8 HEV) con 140 hp; la quinta generación del sistema híbrido fue introducida con la actualización del Corolla y contribuye a las mejoras tanto en potencia (123 hp en el modelo saliente) como en eficiencia. Se promete la introducción de la variante híbrida enchufable 2.0 PHEV, con 223 hp y hasta 62 km de conducción en modo 100% eléctrico, para marzo de 2024.
En el C-HR 1.8 HEV, un motor de gasolina es asistido por un motor eléctrico, alimentado por una batería de iones de litio (0.91 kWh de capacidad); velocidad máxima de 170 km/h; 0-100 km/h en 9.9 segundos; y consumo medio de 4.8 l/100 km, según el protocolo WLTP, lo que corresponde a 103 g/km de emisiones de CO2.
Diseñado y producido en Europa, exclusivamente para el mercado del Viejo Continente, a diferencia de su predecesor, que Toyota comenzó a vender en casi todos los mercados de referencia poco después de su lanzamiento, debido a no tener un modelo competitivo en una categoría crucial para el éxito de todas las marcas generalistas (actualmente, también cuenta con el Corolla Cross), el CH-R 1.8 HEV está disponible en Portugal con los niveles de equipamiento Comfort (€36,900), Square Collection (€40,800) y Lounge (€43,360).
El cliente objetivo del C-HR valora la experiencia de conducción, el diseño distintivo y el equipamiento, en lugar del espacio interior o la capacidad de carga, razón por la cual la marca japonesa justifica el espacio limitado en los asientos traseros y el maletero, con solo 388 litros de capacidad. Centrándose únicamente en la experiencia de conducción, tras los primeros kilómetros al volante de la segunda generación del C-HR, destacamos el progreso significativo demostrado por la variante GA-C de la plataforma TNGA, con ingenieros de Toyota interviniendo (de manera muy efectiva…) en el chasis para mejorar tanto el confort de marcha como el rendimiento dinámico del SUV compacto, que ahora es más ágil. Esto se puede sentir, por ejemplo, en la sensación de la dirección.