En una advertencia contundente, el Congreso de EE. UU. ha planteado la posibilidad de «acción militar directa» si las tropas norcoreanas entran en el campo de batalla en Ucrania. El representante Michael Turner, el principal republicano en el Comité de Inteligencia de la Cámara, dejó claro que la participación de Corea del Norte en el conflicto Rusia-Ucrania sería una «línea roja» para Estados Unidos, un movimiento que él cree que debería provocar una seria respuesta militar.
Esta postura audaz, reportada por The Hill, refleja las crecientes preocupaciones estadounidenses a medida que la inteligencia de Corea del Sur y las declaraciones de la Casa Blanca sugieren que Corea del Norte ya ha enviado hasta 3,000 tropas a Rusia. Estas tropas, según se informa, tienen como objetivo fortalecer las fuerzas rusas mientras continúan el prolongado conflicto con Ucrania. La administración Biden, junto con la vicepresidenta Kamala Harris, está siendo instada a adoptar una postura firme, señalando a Corea del Norte y Rusia que una mayor escalada no quedaría sin respuesta.
«Si las tropas de Corea del Norte entran en el territorio soberano de Ucrania,» declaró Turner, «EE. UU. necesita considerar seriamente la posibilidad de tomar acción militar directa contra las tropas de Corea del Norte.» Esto marcaría una expansión significativa de la participación de EE. UU. en el conflicto, potencialmente elevando las tensiones globales mientras Washington busca disuadir a Pyongyang de un mayor apoyo militar a Rusia.
La inteligencia surcoreana informó inicialmente que soldados norcoreanos habían sido enviados a Rusia, con estrictos esfuerzos para mantener el despliegue en secreto. Las autoridades norcoreanas, según se informa, están aislando a las familias de los soldados desplegados para evitar que la noticia se propague, subrayando el secretismo que rodea su participación. En respuesta, Alemania y Austria han convocado a los embajadores norcoreanos, subrayando la condena internacional.
La Casa Blanca, respaldando la postura de Turner, advirtió que cualquier personal militar norcoreano que participe en combates en suelo ucraniano sería tratado como objetivos legítimos. El respaldo de la administración Biden a esta política sugiere un compromiso inquebrantable con la defensa de la soberanía de Ucrania, incluso si eso significa confrontar a las fuerzas norcoreanas.
Las fuentes de este artículo incluyen: The Hill, informes de inteligencia surcoreana.