Rusia ha mostrado su creciente destreza en la guerra de drones, publicando imágenes de un dron de Vista en Primera Persona (FPV) golpeando un Vaso de Superficie No Tripulado (USV) similar al Magura durante un ejercicio de tiro en el Mar Negro. El Ministerio de Defensa de Rusia (RuMoD) afirma que el USV era un «trofeo» capturado de Ucrania, aunque algunos expertos creen que podría haber sido una réplica utilizada para entrenar a los operadores de drones FPV.
Esta exhibición de capacidades de drones FPV, lanzados desde un buque patrullero ruso en movimiento, señala una nueva fase en la guerra de drones, donde se aborda con precisión la complejidad de atacar embarcaciones navales rápidas como los USVs. El ejercicio de entrenamiento también destaca la estrategia de Rusia para mejorar sus defensas marítimas contra los cada vez más efectivos USVs kamikazes de Ucrania.
En las imágenes publicadas, se puede ver al vaso similar al Magura zigzagueando a través del agua, imitando escenarios de combate reales, mientras el operador del dron FPV maniobra hábilmente el UAV hacia una trayectoria de colisión, destruyendo finalmente el objetivo. Aunque la explosión fue menor—probablemente debido a la eliminación de cualquier carga explosiva del USV—el video subraya el creciente uso de drones por parte de Rusia en la guerra marítima.
Este ejercicio de entrenamiento se produce tras un aumento de los ataques con drones ucranianos contra activos rusos, notablemente en el Mar Negro. El ataque del dron FPV demuestra los esfuerzos de Rusia para contrarrestar estas amenazas, utilizando tanto drones aéreos como tecnologías navales avanzadas. Con los drones desempeñando ahora un papel pivotal en las operaciones navales, el campo de batalla en el Mar Negro está destinado a volverse aún más peligroso para ambos lados.