Thierry Neuville está al borde de la historia. Después de más de una década de búsqueda incansable, la estrella del rally belga está a un paso de conseguir su primer título en el Campeonato Mundial de Rally (WRC). Sin embargo, al dirigirse a la final de la temporada en Japón, las apuestas no podrían ser más altas—tanto para él como para su equipo Hyundai.
“No hay historia hasta el domingo”: Neuville mantiene la calma
A pesar del entusiasmo que rodea su inminente coronación, Neuville se mantiene enfocado en la tarea que tiene por delante. Cuando se le presionó sobre la importancia de este fin de semana, desvió la atención: “No hay historia. Hasta el domingo, no hay historia.”
Para Neuville, el objetivo es simple: conseguir solo seis puntos, y el codiciado campeonato será suyo. Pero las apuestas se duplican—Hyundai también está inmerso en una feroz batalla por el título de fabricantes, con Toyota como una amenaza formidable.
“Todos en el equipo están alineados en nuestro objetivo principal, que es el título de pilotos,” explicó Neuville. “Pero hemos intentado toda la temporada apoyar también el título de fabricantes. Creo que mis compañeros de equipo pueden tener un poco más de presión que yo en ese aspecto este fin de semana.”
Acto de equilibrio: Ganar la guerra sin pelear la batalla
A diferencia de su estilo agresivo habitual, el enfoque de Neuville este fin de semana será inusualmente conservador. “Ganar el rally no importa. Ganar el campeonato sí,” admitió. Su estrategia es clara: mantener un ritmo constante, evitar riesgos y reaccionar solo si las circunstancias lo exigen.
“No creo que se sienta como un rally normal para mí,” dijo Neuville sin rodeos. “Necesitamos estar más o menos donde deberíamos estar y ser capaces de reaccionar en ambas direcciones.”
Este enfoque contenido coloca la carga de la campaña de fabricantes de Hyundai sobre los hombros de Ott Tänak y Andreas Mikkelsen.
Tänak se Juega Todo por Hyundai
Tänak, aún matemáticamente en la lucha por el título de pilotos, enfrenta una batalla difícil pero sigue decidido a hacer su parte en la candidatura de fabricantes de Hyundai. “No podemos dejar que Toyota tome uno, dos, tres,” dijo sin rodeos. “Necesitamos estar en la mezcla y asegurarnos de que no nos superen.”
La estrategia de Tänak será el opuesto polar de la de Neuville. “Para los fabricantes, no se trata solo de terminar. Necesitamos ser competitivos. Pasar por el recorrido no es suficiente.”
Mikkelsen: El Punto Medio
Mikkelsen, posicionado entre la cautela de Neuville y la agresividad de Tänak, enfatizó la importancia de la adaptabilidad. “Thierry será muy seguro, Ott irá a fondo, y yo estaré en algún lugar intermedio,” dijo. Reconociendo la fortaleza de Toyota en casa, Mikkelsen sabe que el desafío que se avecina es inmenso. “Va a ser difícil, pero estamos listos para luchar.”
La Escalada de Toyota en Casa
Las esperanzas de Toyota descansan en un fin de semana excepcional. El equipo necesita un barrido limpio de las posiciones más altas en la clasificación del sábado, Super Sunday y la etapa de poder—un resultado que lograron anteriormente esta temporada en Chile.
Sébastien Ogier se mantiene cautelosamente optimista, destacando el rendimiento del equipo a pesar de las recientes dificultades. “Me sentí muy bien en el coche en estos últimos eventos, pero los puntos no reflejan eso. Esta vez, necesitamos juntar todas las piezas y traer el resultado perfecto.”
El compañero de equipo Elfyn Evans, aunque reconoce las escasas posibilidades, insiste en que la presión no es abrumadora. “Estamos bastante lejos. Necesitamos un fin de semana excepcional para llevarnos el título, pero no tenemos nada que perder.”
Un Fin de Semana para la Historia
Con tanto en juego, la final del WRC promete ser un emocionante enfrentamiento. El enfoque medido de Neuville contrasta fuertemente con el asalto total de Tänak, mientras Toyota lucha por recuperar la gloria en casa. Para Neuville, el domingo podría marcar la culminación de años de desamor, casi-aciertos y perseverancia—un logro culminante en una carrera llena de historia.
Mientras los motores rugen y la grava vuela en Japón, una cosa es segura: se hará historia. Ya sea que Neuville reclame su título tan esperado o que Toyota ofrezca una clase magistral en casa, la final del WRC 2024 será recordada como una batalla de nervios, habilidad y determinación.