La retirada de Lewis Hamilton del Gran Premio de Australia fue causada por una unidad de potencia defectuosa del equipo Mercedes de Fórmula 1, según Toto Wolff. La unidad de potencia sufrió un apagado repentino en la vuelta 17, obligando a Hamilton a abandonar la carrera. El Director Técnico James Allison explicó que el motor experimentó una rápida pérdida de presión de aceite, lo que llevó a la decisión de apagarlo. Investigaciones posteriores revelaron que la unidad de potencia estaba más allá de la reparación y tuvo que ser descartada. Wolff reconoció la inusual falla del hardware y afirmó que era incierto si se necesitaría otra unidad de potencia para el resto de la temporada. Este contratiempo se suma a los desafíos enfrentados por Hamilton y Mercedes en la temporada de 2024, que ya ha visto problemas de calibración con su nuevo cargador W15. A pesar de esto, Hamilton se mantuvo optimista después de las sesiones de entrenamiento en Suzuka, describiéndolas como las mejores sesiones del año hasta ahora.
