El empresario multimillonario Elon Musk ha desatado una ola de controversia tras anunciar un plan para regalar $1 millón cada día hasta las elecciones presidenciales de noviembre, lo que ha generado preocupaciones sobre la legalidad de tales pagos. Musk, quien se ha alineado públicamente con el candidato republicano Donald Trump, inició la campaña con un evento de alto perfil en Pennsylvania, donde entregó un cheque de $1 millón a un hombre llamado John Dreher, lo que atrajo una inmediata atención mediática.
El anuncio se realizó durante un evento de America PAC en Harrisburg, Pennsylvania—uno de varios eventos de acción política que Musk ha organizado para movilizar apoyo a Trump. America PAC, que Musk fundó, tiene como objetivo reunir a votantes en estados clave, pero los llamativos sorteos han levantado cejas sobre sus implicaciones legales.
La enorme fortuna de Musk y su creciente influencia en el ámbito político han suscitado un debate sobre si tales incentivos financieros cruzan líneas éticas y legales. Los críticos argumentan que ofrecer premios en efectivo a los votantes, independientemente de la intención, podría violar las leyes federales de elecciones diseñadas para prevenir incentivos financieros para votar.
Musk, siempre el showman, presentó el cheque de $1 millón a Dreher con un comentario casual: “Por cierto, John no tenía idea. Así que, de todos modos, de nada,” aparentemente restando importancia a cualquier preocupación potencial mientras animaba a la multitud en el evento.
Aumentan las preocupaciones legales sobre el sorteo de Musk
Los expertos en leyes electorales ya han levantado banderas rojas, citando leyes federales que prohíben explícitamente ofrecer dinero o cualquier cosa de valor a los votantes a cambio de registrarse o emitir un voto. El gobernador de Pennsylvania, Josh Shapiro, que apareció en Meet the Press de NBC, expresó su alarma por el esquema de regalos de Musk, calificándolo de “profundamente preocupante” y sugiriendo que podría justificar la intervención de las fuerzas del orden. “Es algo que las fuerzas del orden podrían considerar”, dijo Shapiro.
El Departamento de Justicia de EE. UU. ha sostenido durante mucho tiempo que tales pagos violan las leyes federales electorales. Según el manual de delitos electorales del Departamento de Justicia, es ilegal pagar a individuos para que se registren o voten, un delito que puede ser castigado con prisión. Esto incluye no solo pagos monetarios directos, sino también cualquier otro artículo de valor, como regalos, licor o oportunidades de lotería. El llamativo sorteo diario de $1 millón de Musk podría potencialmente caer en esta categoría, planteando serias preguntas sobre la legalidad del esquema.
El Juego de Poder Político de Musk
El momento y la ubicación del sorteo de efectivo de Musk han añadido drama político. Pennsylvania, un estado clave, se considera uno de los campos de batalla más críticos en las elecciones de 2024. Musk ha utilizado su plataforma America PAC para presentar las próximas elecciones como un momento crucial para el país, instando a los partidarios a votar temprano y a alentar a otros a hacer lo mismo. Su riqueza personal y sus profundos lazos con el mundo tecnológico lo han posicionado como un jugador poderoso en el panorama político de alto riesgo de este año.
El apoyo de Musk a Trump y su promesa de seguir regalando millones de dólares de cara a las elecciones podrían tener implicaciones de gran alcance, no solo para los candidatos, sino para la integridad del proceso electoral en sí.
A medida que los expertos legales y los funcionarios electorales reflexionan sobre las ramificaciones de la jugada financiera de Musk, muchos se preguntan si el multimillonario ha cruzado una línea o si su último movimiento audaz es solo otro ejemplo de su disposición a interrumpir el statu quo, tanto en los negocios como en la política.
Los ojos de la nación están ahora en Pennsylvania, mientras los regalos de alto perfil de Musk continúan y las preguntas sobre su legalidad crecen más fuertes con cada día que pasa.