UNA PESADILLA QUE NO DESAPARECE: MASSA LLAMA A RICCIARDO POR SU BROMA EN SINGAPUR
El Gran Premio de Singapur de 2008 sigue siendo un recuerdo aterrador para Felipe Massa, y cualquier referencia al notorio escándalo de «Crashgate» que le costó el título de F1 sigue siendo un tema sensible. Así que, cuando Daniel Ricciardo hizo una broma ligera sobre un incidente similar durante el GP de Singapur de este año, Massa no lo encontró gracioso. El ex piloto de F1 brasileño, que actualmente está luchando en los tribunales por los resultados manipulados de esa infame carrera, criticó los comentarios de Ricciardo, condenando la broma como «poco amable» y un recordatorio de uno de los momentos más controvertidos en la historia de la Fórmula 1.
CRASHGATE: EL ESCÁNDALO QUE COSTÓ A MASSA UN TÍTULO
El Gran Premio de Singapur de 2008 fue la primera carrera nocturna en la F1, y Massa estaba en una posición privilegiada para ganar. Había asegurado la pole position, luciendo fuerte en su batalla por el título contra Lewis Hamilton. Pero durante la carrera, Renault ordenó deliberadamente a su piloto, Nelson Piquet Jr., que chocara, provocando un coche de seguridad y caos en el pit lane—especialmente para Ferrari. En medio de la confusión, la carrera de Massa se arruinó por una parada en boxes fallida, y lo que debería haber sido una victoria se convirtió en una pérdida devastadora. El incidente, ahora conocido como Crashgate, le costó a Massa el campeonato de 2008, que perdió por poco ante Hamilton.
Massa nunca ha podido deshacerse del rencor de esa carrera, así que cuando Ricciardo mencionó en broma un choque para sacar un coche de seguridad, el brasileño no tardó en expresar su descontento.
“Definitivamente no es una broma agradable, y por supuesto no es algo bonito que me haya pasado,” comentó Massa, claramente aún herido por el escándalo que descarriló su carrera.
LA BATALLA LEGAL DE MASSA Y UNA LUCHA POR LA JUSTICIA
Aunque el paddock de F1 puede haber pasado página respecto a los eventos de 2008, Massa no lo ha hecho. El hombre de 43 años ha estado luchando en los tribunales para anular los resultados del GP de Singapur, argumentando que la carrera manipulada alteró injustamente el campeonato. Sin embargo, irónicamente, si los esfuerzos de Massa tienen éxito, podría terminar beneficiando a Hamilton en lugar de a Massa mismo. Si Renault fuera descalificado, Hamilton sería promovido al segundo lugar en la carrera, aumentando su total de puntos.
A pesar de esto, Massa insiste en que su batalla legal no se trata de quitarle el título a Hamilton, sino de aclarar la situación.
“Para ser honesto, esta no es una pelea con Lewis. Lewis no tiene nada que ver con esta pelea en absoluto,” explicó Massa. “La lucha es sobre lo que sucedió en la carrera, que no fue bueno para el deporte. La lucha es que esta carrera debería ser cancelada. Esa es la lucha.”
LOS FANS DE HAMILTON RESPONDEN
Mientras el enfoque de Massa está en la integridad del deporte, la base de fans de Hamilton no ha permanecido en silencio sobre su oposición. Muchos argumentan que revisar el campeonato de 2008 más de una década después es innecesario e injusto para Hamilton, quien podría perder su primer título mundial de F1. La idea de que el campeonato sea retirado de Hamilton ha avivado intensos debates dentro de la comunidad de F1, con muchos aficionados viendo la lucha de Massa como inútil.
UN FUTURO MÁS ALLÁ DE LA PISTA
Desde que se retiró de la Fórmula 1 en 2017, Massa ha permanecido involucrado en el deporte, trabajando como analista y comentarista en varias carreras. Su presencia en los eventos de F1 lo mantiene cerca de la acción, pero las cicatrices de su pérdida del título en 2008 siguen siendo evidentes. Su lucha por la justicia puede parecer una quimera, pero para Massa, es una cuestión de principio: un intento de corregir lo que él cree que es un momento profundamente injusto en la historia de la F1.
A medida que las batallas legales continúan y Massa presiona para reescribir el resultado de esa infame noche en Singapur, está claro que para él, la carrera por el título de 2008 está lejos de haber terminado.