El asesor de Red Bull, Helmut Marko, expresó su insatisfacción con la decisión tomada por la FIA de cambiar el punto de activación del DRS en Spa-Francorchamps durante el GP de Bélgica. El punto se desplazó 75 metros hacia atrás desde la recta de Kemmel, lo que resultó en una situación de adelantamiento más desafiante en las largas rectas de la pista. Marko encontró tan difícil adelantar a otros coches como en la pista sinuosa de Hungría y se sorprendió por el cambio.
Marko consideró que acortar la zona del DRS era incomprensible, especialmente teniendo en cuenta la generación actual de coches. El sistema DRS está diseñado para ayudar a adelantar en las rectas, y reducir la zona innecesariamente dificultó que los pilotos se adelantaran en pistas donde el adelantamiento debería ser más fácil.
En cuanto al Campeonato de Pilotos, Marko veía la batalla entre McLaren y Mercedes como una oportunidad para que Red Bull mantuviera su ventaja. Hizo hincapié en la importancia de evitar pequeños errores y el impacto potencial que podrían tener en su ventaja. A pesar de tener una ventaja significativa, Marko reconoció la necesidad de estar alerta, ya que pequeños errores o el retiro de un coche podrían cambiar rápidamente la competencia. Consideró la rivalidad entre McLaren y Mercedes como un factor útil para mantener a Max Verstappen, el piloto de Red Bull, en primer lugar.
Mirando hacia el futuro, Marko expresó optimismo de que Red Bull superaría los desafíos enfrentados en las últimas carreras y continuaría luchando por el título del campeonato.