Israel ha anunciado que el innovador sistema de defensa láser Iron Beam estará operativo para octubre de 2025, ofreciendo una nueva arma contra las persistentes amenazas de drones y cohetes de grupos militantes. Desarrollado con un costo de 413 millones de libras, este interceptor láser está diseñado para apuntar y destruir amenazas entrantes con precisión milimétrica a la velocidad de la luz, costando una fracción del sistema de defensa Iron Dome existente en Israel.
El momento del lanzamiento del Iron Beam coincide con el aumento de ataques por parte de grupos armados, incluidos Hezbollah y Hamas, que recientemente han disparado cohetes y drones contra sitios sensibles en Israel. Irán también lanzó una lluvia de misiles hacia Israel a principios de este mes, subrayando la necesidad de tecnologías de defensa avanzadas. El Iron Beam tiene como objetivo complementar los cuatro sistemas de defensa de misiles actuales de Israel y abordar las crecientes complejidades de las amenazas aéreas.
Desarrollado por Rafael Advanced Defense Systems y Elbit Systems, el Iron Beam se clasifica como un Sistema de Arma Láser de Alta Energía de 100 kilovatios. Apunta a proyectiles como cohetes, drones y morteros dentro de varios kilómetros, ofreciendo una precisión milimétrica con un costo operativo casi insignificante. El Dr. Danny Gold, un científico clave en el proyecto Iron Beam, señaló que mientras cada lanzamiento del Iron Dome puede costar más de $60,000, el Iron Beam basado en láser incurre solo en unos pocos dólares por uso, una ventaja vital dada las extensas y sostenidas necesidades de seguridad de Israel.
Aún así, existen limitaciones. A diferencia del Cúpula de Hierro, que opera eficazmente bajo todas las condiciones climáticas, la tecnología láser del Iron Beam falla en condiciones de lluvia, niebla y polvo, ya que las partículas de agua absorben y dispersan la energía del láser. El sistema también requiere una línea de visión clara para funcionar, lo que hace que su ubicación sea crucial. Sin embargo, el sistema ofrece disparos ilimitados sin municiones, reduciendo tanto los obstáculos logísticos como la dependencia de interceptores de alto costo.
El ex Primer Ministro israelí Naftali Bennett elogió el Iron Beam como un “cambiador de juego estratégico”, capaz de reconfigurar las capacidades defensivas de Israel y más allá. Aunque la línea de tiempo exacta para el despliegue del sistema sigue siendo flexible, con ensayos en curso probablemente debido a las crecientes preocupaciones de seguridad, los funcionarios de defensa israelíes han dejado claro que esta tecnología representa un gran avance en la lucha contra amenazas en evolución. La integración del Iron Beam junto al Cúpula de Hierro creará una defensa en múltiples capas capaz de neutralizar un amplio espectro de ataques, brindando a Israel una poderosa nueva herramienta en su arsenal de seguridad.
Para un mundo que observa los rápidos avances en defensa, el potencial del Iron Beam para abordar de manera rentable nuevas amenazas—utilizando un rayo láser que viaja a la velocidad de la luz—podría ser un modelo para futuras defensas aéreas en todo el mundo.