Cuando Saquon Barkley regresó al MetLife Stadium como un Águila, no esperaba la brutal recepción de los aficionados de los Giants. Barkley fue abucheado ruidosamente e incluso vio que su camiseta era quemada antes del inicio del partido. Jason Kelce, exestrella de los Eagles, rápidamente saltó en defensa de Barkley. “Por el amor de Dios, no entiendo por qué los aficionados de los Giants odian a Saquon por lo que pasó”, escribió Kelce, señalando a la dirección de los Giants por permitir que su exestrella firmara con un rival de división. Barkley, ahora con 482 yardas por tierra esta temporada, aseguró un contrato de tres años con los Eagles después de que los Giants lo dejaran ir.
