EL REEMPLAZO DE MEGAN RAPINOE CONTINÚA EL LEGADO DEL USWNT NO QUERIDO
Con el retiro de Megan Rapinoe, Lindsey Horan se hace cargo de continuar la tradición de convertir al USWNT en el equipo más despreciado del deporte. En los últimos años, el equipo ha hecho todo lo posible para dividir su base de aficionados y perder seguidores. Desde que las jugadoras se arrodillaron durante el Himno Nacional hasta promover políticas radicales y abogar por hombres biológicos en el deporte femenino, el USWNT se ha vuelto insufrible.
Un grupo que había escapado de la crítica del equipo hasta ahora son los leales aficionados al fútbol americano que apoyan al equipo sin importar qué. Sin embargo, Horan, la capitana del equipo nacional, recientemente cambió eso. En una entrevista con The Athletic, Horan expresó su creencia de que los aficionados al fútbol americano no son inteligentes y carecen de comprensión del juego. Ella reconoció que está mejorando, pero sus comentarios aún reflejan un desdén hacia los aficionados.
Las frustraciones de Horan parecen surgir de la repercusión en la Copa Mundial Femenina, donde la ex capitana del USWNT, Carli Lloyd, criticó el comportamiento celebratorio del equipo tras un decepcionante empate con Portugal. Lloyd también abordó el sentido de derecho entre las jugadoras, lo cual fue recibido con reacciones negativas por parte de aquellos que no estaban dispuestos a aceptar críticas constructivas. Horan tomó excepción a los comentarios de Lloyd, afirmando inicialmente que Lloyd no tenía comprensión de las experiencias del equipo. Sin embargo, Horan más tarde admitió que el USWNT no estaba completamente preparado para el torneo, validando las críticas de Lloyd.
Es evidente que los comentarios de Lloyd continúan persiguiendo a Horan, y ahora está dirigiendo sus frustraciones hacia los aficionados que siguen apoyando al equipo. A pesar de las deficiencias del equipo, los comentarios de Horan solo alienan aún más a los dedicados seguidores.
En conclusión, Lindsey Horan ha asumido el papel dejado por Megan Rapinoe y está contribuyendo a la reputación de la USWNT como un equipo poco querido. Con sus comentarios sobre los aficionados al fútbol estadounidense y su negativa a reconocer críticas válidas, Horan divide aún más a la base de aficionados y socava la lealtad de los seguidores.