En una advertencia grave que resuena con escenarios apocalípticos, más de 40 destacados científicos del clima han emitido una carta abierta sonando la alarma de que la Corriente del Golfo, una corriente oceánica crítica que transporta agua cálida a través del Atlántico, podría estar al borde del colapso. Si este proceso falla, las consecuencias podrían desatar impactos «catastróficos» e irreversibles que durarían siglos, reconfigurando los patrones climáticos y perturbando los ecosistemas en todo el mundo.
La Corriente del Golfo, parte de la mayor Circulación Meridional de Vuelco del Atlántico (AMOC), transporta agua cálida desde el este de los Estados Unidos hasta Europa, un proceso que mantiene las temperaturas en Europa Occidental mucho más cálidas de lo que serían de otra manera. Sin embargo, este fenómeno puede no ser tan estable como se creía anteriormente. Los científicos temen que el aumento de las emisiones de carbono y el agua de deshielo glaciar estén empujando al AMOC a un umbral crítico, arriesgando un apagón completo de la Corriente del Golfo en sí.
«Si el AMOC colapsa, toda la cuenca del Atlántico y las regiones circundantes enfrentarán cambios climáticos extremos y potencialmente mortales», escribieron los científicos, destacando que las regiones de Europa Occidental podrían ver caer las temperaturas promedio entre 10°C y 15°C (18°F a 27°F). Tal resultado traería a Escocia y el norte de Europa a una era de temperaturas frías, afectando la agricultura, la infraestructura y la vida diaria.
Este posible colapso recuerda los devastadores escenarios retratados en películas como El Día Después de Mañana, donde el colapso climático lleva a una abrupta era de hielo. Aunque la película es ficción, los científicos enfatizan que los impactos en el mundo real serían “no menos catastróficos.” El fallo del AMOC podría sumergir regiones de Europa en inviernos fríos, mientras que los cinturones de monzones y los patrones de lluvia tropical se desplazan hacia el sur, lo que podría desencadenar sequías, hambrunas y extremos climáticos que serían sin precedentes en la historia moderna.
La carta de los científicos señala que el AMOC colapsó por última vez hace unos 12,000 años, hacia el final de la última Era de Hielo. En ese entonces, las temperaturas globales cayeron, reconfigurando ecosistemas y sociedades humanas. Hoy, el mundo enfrenta riesgos similares si el AMOC colapsa nuevamente, esta vez impulsado por el cambio climático inducido por el ser humano. La NASA y otras agencias de monitoreo han detectado signos de debilitamiento de las corrientes, llevando a los científicos a lanzar un llamado urgente para una acción inmediata que frene las emisiones y mitigue más interrupciones.
Las advertencias llegan mientras los responsables de políticas se preparan para otra ronda de negociaciones climáticas, enfrentando una creciente presión para adoptar políticas climáticas más estrictas. Los científicos instan a los líderes globales a actuar de manera decisiva antes de que la Corriente del Golfo alcance un punto de no retorno.
¿Escuchará la humanidad esta advertencia a tiempo, o enfrentaremos las severas consecuencias de ignorar las señales del planeta? Solo una acción climática audaz puede mantener fluyendo la Corriente del Golfo y evitar esta inminente catástrofe.