En un giro dramático de los acontecimientos, los Boston Red Sox han cortado lazos con seis miembros del cuerpo técnico de Alex Cora, marcando un cambio significativo en el enfoque del equipo tras una temporada turbulenta. Según lo informado por Alex Speier del Boston Globe, la purga incluye al entrenador de primera base Andy Fox, al entrenador de bullpen Kevin Walker, al asistente de bateo Luis Ortiz, al entrenador de habilidades mentales Rey Fuentes, al entrenador Ben Chadwick y al receptor de bullpen Mani Martinez. Esta profunda reestructuración sugiere que Boston está listo para renovar su estrategia tras una decepcionante temporada 2024.
Andy Fox, quien fue ascendido a entrenador de primera base apenas esta pasada temporada, había sido un servidor leal durante más de una década, trabajando anteriormente como coordinador de campo. El ex infielder utility, que pasó nueve años en las grandes ligas, principalmente con los Diamondbacks y Marlins, ahora se encuentra en la cuerda floja mientras los Red Sox buscan un nuevo comienzo.
Luis Ortiz, un rostro familiar que jugó brevemente para los Red Sox a mediados de la década de 1990, también ha sido despedido después de servir como asistente de bateo durante tres años. A pesar de su tiempo con los Rangers bajo Chris Woodward de 2018 a 2021 como el entrenador principal de bateo, Ortiz no pudo generar suficiente poder ofensivo para Boston. La asociación de Ortiz con Ben Rosenthal, quien también es asistente del entrenador de bateo Peter Fatse, no fue suficiente para salvar su lugar en el roster.
El bullpen ha sido un talón de Aquiles para los Red Sox, y finalmente cayó el hacha sobre el entrenador de bullpen Kevin Walker, quien asumió el cargo en la temporada baja de 2020-21 tras un breve período como asistente de entrenador de pitcheo. A pesar de sus esfuerzos, el bullpen de Boston se clasificó entre los peores de la liga, terminando en 24º lugar en ERA (4.39) y 23º en porcentaje de ponches (21.9%). Después del descanso del Juego de Estrellas, la implosión del bullpen fue evidente; registraron un abismal 5.45 de ERA, el peor en MLB, y lideraron la liga en ventajas perdidas con 16. Los números pintaron un cuadro claro, y Walker se convirtió en el chivo expiatorio de las deficiencias del bullpen.
Los movimientos de mitad de temporada de la oficina principal, incluyendo la adquisición de Lucas Sims y Luis García, resultaron desastrosos. Las lesiones agravaron aún más el caos, ya que los relevistas clave Kenley Jansen y Chris Martin se perdieron un tiempo significativo, descarrilando las esperanzas de Boston de un lugar en la Wild Card. El colapso del bullpen fue un factor importante en la incapacidad del equipo para mantenerse competitivo, y las repercusiones ahora se han extendido al personal de entrenadores.
Con el hacha en movimiento, el nuevo Director de Operaciones de Béisbol Craig Breslow enfrenta la monumental tarea de reconstruir el bullpen desde cero. ¿Su prioridad inmediata? Reforzar un cuerpo de relevistas frente al destacado Justin Slaten y esperar tener a Liam Hendriks completamente saludable. Los movimientos sugieren un mensaje claro: los Red Sox no están dispuestos a tolerar otra temporada de mediocridad y están decididos a construir un bullpen formidable para competir en el futuro.
Para los fanáticos de los Red Sox, la última reestructuración puede ofrecer un rayo de esperanza para un nuevo comienzo. Pero con una serie de decepciones aún presentes, la presión ahora recae sobre Breslow y su personal para realizar las contrataciones y mejoras adecuadas en una temporada baja de vida o muerte.