La alianza entre Rusia y Corea del Norte ha tomado un giro sorprendente, con informes que indican que tropas de élite norcoreanas se están uniendo a las filas de Rusia en el conflicto de Ucrania. Un reciente aumento en los vuelos militares entre Pyongyang y Moscú ha alimentado sospechas de que las fuerzas norcoreanas están participando en preparativos de combate en suelo ruso, un movimiento que los expertos dicen podría intensificar el conflicto.
Según la inteligencia surcoreana, Corea del Norte ha desplegado alrededor de 12,000 soldados, incluidos miembros de su élite XI Cuerpo, en Rusia, con tropas que supuestamente están siendo entrenadas en cinco bases rusas. Datos de vuelo de fuentes abiertas confirman que un avión Ilyushin Il-96 ruso, capaz de transportar a más de 400 personas, voló recientemente de Hwangju, Corea del Norte, a Moscú. Este desarrollo es uno de varios indicadores de que Pyongyang está enviando tanto tropas como expertos militares para ayudar a Moscú, como lo atestiguan avistamientos recientes de oficiales norcoreanos que supuestamente están asistiendo en la región de Kursk de Ucrania.
Las revelaciones sobre la implicación de Corea del Norte marcan un cambio inquietante, ya que el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky y funcionarios estadounidenses han informado de inteligencia que sugiere que Corea del Norte podría estar preparando una escalada en su apoyo a Rusia. John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de EE. UU., destacó las preocupaciones de que aproximadamente 3,000 tropas norcoreanas habían sido vistas en Rusia participando en ejercicios militares y podrían unirse pronto a operaciones en la primera línea.
Los expertos en defensa están sonando alarmas sobre las implicaciones de esta nueva alianza. Alexander Lord, un analista de Sibylline, señaló que Corea del Norte parece estar desplegando unidades de élite en lugar de enviar fuerzas desechables. “Estas son fuerzas especiales bien entrenadas, no carne de cañón. Están aquí para ganar valiosa experiencia en combate”, dijo, señalando que Corea del Norte podría estar preparándose para llevar de vuelta lecciones del frente para mejorar su propia capacidad militar.
La cooperación militar entre Moscú y Pyongyang se ha fortalecido tras un pacto de defensa en julio, que supuestamente incluye un acuerdo de intercambio de tropas. Imágenes satelitales e identificación asistida por IA sugieren que el personal norcoreano no solo está presente, sino que se está ocultando dentro de las filas rusas, potencialmente vestido con uniformes militares rusos y dotado de identificaciones falsas de Siberia.
Mientras el Kremlin y Corea del Norte niegan estos informes como “noticias falsas” y “rumores infundados”, las implicaciones estratégicas de las fuerzas norcoreanas en Rusia han suscitado preocupación mundial. Al apoyar las defensas rusas en Kursk, Pyongyang está liberando efectivamente fuerzas rusas para intensificar sus ataques en Ucrania—un movimiento coordinado que los observadores dicen podría cambiar las reglas del juego en la región.
A medida que el conflicto en Ucrania se vuelve cada vez más internacional, la pregunta sigue siendo: ¿cómo responderá Occidente a esta peligrosa nueva alianza?
