El tercera base de los Dodgers, Max Muncy, está canalizando la mentalidad dura y de todo o nada de su triunfante temporada de la Serie Mundial de 2020. Reflexionando sobre un dicho que vivieron en ese entonces—‘Hey, estoy preparado para morir ahí afuera hoy’—Muncy revela que esta mentalidad de guerrero está regresando al dugout, marcando el tono para su actual carrera en la postemporada. Y si buscas pruebas, no busques más allá de los esfuerzos heroicos de Freddie Freeman en el campo.
A pesar de una lesión en el tobillo que dejaría fuera a la mayoría de los jugadores, el primera base de 35 años realizó una arriesgada base robada, colocándose en posición de anotar desde temprano. Aunque no condujo a una carrera, reavivó el espíritu combativo del equipo. Su determinación mostró que todavía podía ser una fuerza clave, con o sin lesión. El campocorto de los Dodgers, Miguel Rojas, quien también está lidiando con una distensión en el aductor izquierdo, alabó el compromiso de Freeman. “Cuando ves a un tipo como Freddie pasando por lo que está pasando y haciéndose disponible para jugar, eso dice mucho,” declaró Rojas, describiendo el juego de Freeman como nada menos que “casi un milagro.”
El dugout de los Dodgers zumbaba de admiración, inspirado por la perseverancia de su líder veterano. A medida que el equipo busca aprovechar esta energía, todos los ojos están puestos en Freeman—prueba de que el corazón y la determinación pueden cambiar el rumbo en esta serie de alta tensión.