Portugal necesitará invertir alrededor de 15 mil millones de euros en 76,000 nuevos puntos de carga para vehículos eléctricos para cumplir con los objetivos para 2050, según un estudio publicado por Mobi.E, la red pública de carga de vehículos eléctricos.
El estudio «Infraestructura de Carga para Apoyar la Transición Energética de la Movilidad en Portugal» predice que para 2025 se crearán más de nueve mil puntos de carga, y para 2050 se establecerán más de 76 mil puntos de carga, totalizando más de 80 mil puntos.
En cuanto al valor de la inversión, se espera una aplicación de capital de alrededor de 1.7 mil millones de euros para 2050 para cumplir con la regulación europea «Reglamento sobre Infraestructura de Combustibles Alternativos» (AFIR). «Esta inversión permitirá un ahorro adicional de 3.3 millones de toneladas de CO2, con un beneficio económico estimado de 1.9 mil millones de euros,» afirma el estudio de Mobi.E.
El estudio también aborda la creación de una red nacional de repostaje de hidrógeno, para la cual se estima que se requerirán 37 estaciones de repostaje para 2030, representando una inversión de aproximadamente 219 millones de euros.
«Como instrumento público para el desarrollo de la movilidad sostenible, es nuestra responsabilidad proporcionar el crecimiento más rápido de una red integral en todo el país, con el fin de facilitar cada vez más la transición energética, pero también contribuir con información y conocimiento que permita tomar las decisiones más precisas en este proceso,» enfatiza Luís Barroso, Presidente de Mobi.E, citado en el estudio.
Para 2050, se instalarán un total de 7,750 puntos de carga rápida y 10,200 puntos de carga ultra-rápida. Actualmente, el porcentaje promedio de estaciones de carga rápida y ultra-rápida en Portugal es del 37%, un valor que está por encima del promedio europeo del 20%. En cuanto a los puntos de carga para vehículos pesados, el estudio prevé que se instalarán 1,588 adicionales para 2050.
Otro dato relevante presentado en el estudio es la potencia de la red, que actualmente es de 216 MW (por encima del valor necesario de 195 MW), pero con una previsión de alcanzar 1,230 MW para 2030 y 3,320 MW para 2050.
Con el fin de desmitificar algunos de los conceptos asociados con la movilidad eléctrica, el estudio también explica que para vehículos con una autonomía de 300 km, solo se necesitan aproximadamente dos cargas al mes (considerando una distancia promedio de 20 km por día) o seis veces al mes en áreas suburbanas o rurales (donde la distancia promedio recorrida por día es de 60 km).
En otras palabras, el estudio demuestra que no es necesario tener un punto de carga para cada alojamiento, sino más bien un cargador por cada 10 unidades de vivienda en áreas urbanas, o 2 cargadores por cada 10 unidades de vivienda en áreas suburbanas y rurales. Según los datos de ACEA integrados en el estudio, también vale la pena considerar que el porcentaje de cargas realizadas en estaciones de carga públicas es del 67% en las ciudades, 52% en áreas suburbanas y 57% en áreas rurales.»