Recientemente, Ferrari llevó a cabo pruebas en los protectores de spray experimentales de la FIA en su pista de pruebas en Fiorano. El coche utilizado para las pruebas estaba equipado con cubiertas de rueda visualmente más llamativas en comparación con la versión probada anteriormente por Mercedes. Otro coche de Ferrari, en su forma convencional, también corrió junto al coche de prueba para evaluar la visibilidad. El objetivo de estas pruebas es evaluar la eficacia del ‘Paquete para Condiciones de Tiempo Húmedo’ (WWP), que es un conjunto de especificaciones diseñado para mejorar la visibilidad en condiciones húmedas. El WWP tiene como objetivo evitar una repetición del Gran Premio de Bélgica de 2021, donde el resultado de la carrera se determinó en base a una sola vuelta bajo el coche de seguridad. Esta última prueba de Ferrari forma parte del proceso de recopilación de datos para mejorar el WWP y garantizar que simule con precisión las condiciones húmedas en la pista.
La versión inicial del WWP, probada por Mercedes y conducida por Mick Schumacher en Silverstone el año pasado, generó más spray del deseado. Las cubiertas de rueda utilizadas en esa prueba eran relativamente compactas y en dos secciones. Para resolver este problema, la FIA decidió explorar una segunda versión del WWP que ofrece más cobertura para las ruedas. Por eso Ferrari utilizó las versiones más voluminosas del WWP durante su prueba reciente. El resultado de esta prueba jugará un papel crucial en la definición de los esfuerzos continuos de la FIA para desarrollar un WWP efectivo.
Nikolas Tombazis, director técnico de monoplazas de la FIA, afirmó que la prueba de mayo no es la solución final para el WWP. Él mencionó que, si todo va bien, el WWP podría ser implementado en 2025 como parte de las nuevas regulaciones. Sin embargo, si la prueba no produce resultados satisfactorios, la FIA podría necesitar reconsiderar su enfoque. Una de las principales preguntas que la FIA necesita responder antes de finalizar el WWP es si cubrir las ruedas puede reducir significativamente el spray, idealmente en alrededor del 50%. Es importante observar que una cantidad significativa de spray también es generada por el difusor, que no puede ser cerrado por motivos aerodinámicos. Por lo tanto, no se espera que el WWP elimine completamente los problemas de visibilidad causados por condiciones húmedas. La FIA busca encontrar un equilibrio entre mejorar la visibilidad y mantener la simplicidad de las regulaciones.
En conclusión, la reciente prueba de la Ferrari del WWP representa otro paso en el proceso de desarrollo. La FIA está trabajando activamente para recopilar datos y mejorar el WWP para asegurar que aborde con precisión los desafíos de las condiciones húmedas en la Fórmula 1. El objetivo final es encontrar una solución que reduzca significativamente el spray, al mismo tiempo que mantiene el rendimiento aerodinámico necesario de los coches. La implementación final del WWP aún depende de más pruebas y evaluaciones, con la esperanza de incorporarlo a las regulaciones para 2025 o 2026.