Es el fin de una era. Adrian Newey dejará Red Bull en el primer trimestre del próximo año, casi dos décadas después de unirse al equipo austriaco en la Fórmula 1. Aún se desconoce su destino, especulando que podría ser Ferrari o Mercedes.
Como director técnico desde 2006, el reputado ingeniero ha firmado algunos de los monoplazas más exitosos de la historia reciente, que han permitido cuatro títulos consecutivos a Sebastian Vettel entre 2010 y 2013 y tres a Max Verstappen desde 2021. El holandés está en camino de una cuarta conquista, y el año pasado el monoplaza de Red Bull casi ganó todas las carreras, estableciendo récords de victorias seguidas y de victorias en una sola temporada.
La historia de Newey se entrelaza con la de Red Bull, que inició su proyecto de F1 justo un año antes de su llegada. Antes de partir, el británico dejará de estar involucrado en la categoría reina para centrarse en el desarrollo y entrega del primer hipercoche de Red Bull, el RB17, en el que permanecerá hasta su finalización.
El primer monoplaza de Red Bull con la firma de Newey fue el RB3 en 2007, mientras que al año siguiente fue la primera vez que un proyecto bajo su dirección con los toros rojos ganó una carrera, a través de Toro Rosso y Vettel en el Gran Premio de Italia de ese año. A partir de 2009, comenzaron las victorias, convirtiendo a Red Bull en un equipo de élite en la F1.