El Gran Premio de México 2024 estuvo lleno de acción, pero fue un día difícil para Sergio Pérez. El piloto de Red Bull de 34 años luchó con el ritmo y soportó una dramática batalla en pista con Liam Lawson, de 22 años, quien superó a Pérez en un raro momento de inversión de roles, adelantando a un RB19 con su AlphaTauri. Pero el adelantamiento se volvió personal cuando Lawson le mostró un dedo medio a Pérez, intensificando su rivalidad y añadiendo un giro controvertido a su lucha por la posición.
Lawson, quien está en contienda por un asiento en Red Bull para 2025, ha estado compitiendo con su compañero de equipo Yuki Tsunoda para demostrar su valía. Helmut Marko estableció expectativas claras, afirmando que solo uno de ellos tendría la oportunidad de unirse al equipo principal de Red Bull, convirtiendo cada carrera en un campo de pruebas. El adelantamiento de Lawson en México intensificó esta competencia, y su gesto durante la maniobra pareció llevarla a un nivel más allá de la rivalidad profesional.
Pérez expresó su frustración después de su batalla llena de incidentes, criticando la conducción agresiva de Lawson y cuestionando su actitud. El coche de Pérez sufrió daños significativos en el choque, que él sintió que eran evitables. “Creo que la forma en que llegó a la Fórmula 1, no tiene la actitud correcta para ello,” comentó Pérez, pidiendo a Lawson que se acerque al deporte con más humildad. “Necesita ser un poco más modesto,” añadió Pérez, quien sintió que la falta de respeto de Lawson podría afectar su futuro en la F1.
Este último capítulo en la competencia interna de Red Bull solo añade tensión, con el equipo cayendo al tercer lugar en la clasificación de Constructores después del 1-3 de Ferrari en México. Mientras Red Bull lucha por recuperar su posición con cuatro carreras y dos sprints restantes en la temporada, la ventaja de campeonato de Max Verstappen proporciona un rayo de esperanza. Pero con las rivalidades internas intensificándose, Red Bull necesitará navegar cuidadosamente sus dinámicas de pilotos para mantener vivas sus ambiciones de campeonato.