Noruega ha solicitado oficialmente la compra de 16 sistemas de cohetes de artillería de alta movilidad M142 de Lockheed Martin (HIMARS), junto con un paquete integral de equipos y municiones asociados, en un acuerdo que podría alcanzar los 580 millones de dólares, anunció el viernes la Agencia de Cooperación de Seguridad de Defensa. Esta adquisición, que incluye 15 cápsulas del sistema de lanzamiento múltiple de cohetes guiados (GMLRS) equipadas con cabezas explosivas de fragmentación y alta explosividad, así como 100 misiles de largo alcance del sistema de misiles tácticos del ejército M57 (ATACMS), marca una mejora significativa de las capacidades militares de Noruega.
Esta decisión supone un notable revés para la empresa surcoreana Hanwha Aerospace, que había posicionado su sistema de artillería de cohetes K239 Chunmoo como un fuerte competidor en Noruega y en el vecino Suecia. La empresa surcoreana incluso había firmado un acuerdo de colaboración con la empresa noruega Kongsberg en junio para ofrecer conjuntamente el sistema Chunmoo y otros equipos de defensa en sus respectivos mercados nacionales. Sin embargo, la preferencia de Noruega por el sistema HIMARS indica un cambio en la adquisición de defensa en Europa, influenciado en gran medida por los éxitos en el campo de batalla del uso de HIMARS por parte de Ucrania para repeler a las fuerzas rusas a distancias inalcanzables para la artillería tradicional de tubo.
El acuerdo propuesto de HIMARS subraya el compromiso de Noruega de fortalecer sus capacidades de defensa en respuesta a las amenazas en evolución, al tiempo que garantiza una mayor interoperabilidad con las fuerzas de Estados Unidos y la OTAN. Este acuerdo forma parte de una tendencia más amplia en Europa, donde países como Polonia, Rumania y los estados bálticos han adquirido o realizado pedidos del sistema HIMARS, impulsados por la efectividad probada del sistema en combate.
A medida que las naciones europeas dan cada vez más prioridad a los sistemas avanzados de artillería de cohetes, la competencia en el mercado de defensa se intensifica. Lockheed Martin se ha asociado con Rheinmetall para ofrecer una variante del HIMARS de fabricación europea a Alemania, mientras que otros actores como KNDS y Elbit Systems están desarrollando el sistema de próxima generación EuroPULS. Mientras tanto, el sistema Chunmoo de Hanwha, aunque recientemente adoptado por Polonia, enfrenta una fuerte competencia a medida que naciones como Dinamarca, España y los Países Bajos optan por alternativas como la plataforma PULS de Israel.
Esta creciente demanda de sofisticados sistemas de artillería también ha impulsado nuevos desarrollos en Francia, donde empresas como Safran y Thales están trabajando en sus propias propuestas para satisfacer los requisitos del ejército francés. El último movimiento de Noruega consolida a HIMARS como la opción principal en el panorama de la artillería de cohetes en expansión de Europa, dejando a otros contendientes luchando por asegurar su posición.
Foto y video de Lockheed Martin