Volvo ha confirmado este viernes que planea reducir su participación en Polestar en un 62,7% y dejar de financiar la marca de vehículos totalmente eléctricos, para centrarse en la estrategia de convertirse en una marca 100% eléctrica.
La marca sueca también ha anunciado que las acciones que posee en Polestar se distribuirán entre los accionistas de Volvo, siendo el mayor de ellos Geely, que posee el 79,5% de la empresa sueca.
Este cambio permitirá a Geely tomar el control de Polestar, ya que el presidente de Geely, Li Shufu, es uno de los principales accionistas de la marca de automóviles eléctricos.
«A medida que nos embarcamos en la próxima fase de nuestra transformación, preparándonos para liderar la movilidad de la próxima generación, nuestro enfoque está en el desarrollo de Volvo Cars. La distribución propuesta posiciona estratégicamente a Volvo Cars y proporciona una exposición directa a las acciones de Polestar para nuestros accionistas. Dado que tenemos colaboraciones operativas significativas con Polestar y una relación financiera, tiene sentido que mantengamos influencia a través de una participación minoritaria del 18,0% en Polestar», dijo Jim Rowan, presidente y CEO de Volvo Cars en un comunicado.